Queremos
hablar sobre cómo una página que hace ya tres años
salió a la luz ha sido capaz de unir a muchísima gente,
tanto en los foros como en las calles. Es este un pequeño
manifiesto sobre las famosas quedadas que se organizan en muchos
rincones del mundo entre todos los cyberdarkianos.
Hace ya algún tiempo, y como todos sabemos,
se puso en marcha un proyecto que era más una ilusión
personal que una garantía de éxito en la red. Pero
el mismo tiempo se encargó de demostrar que esto era posible,
y a medida que transcurría los foros se fueron llenando y
una base de datos bastante completa (aunque hablar de completa en
el caso de libros es una contradicción) tomó forma.
A día de hoy, no sólo ha alcanzado gran parte de sus
objetivos sino que ha hecho mucho más en cuanto a las relaciones
humanas: unir a sus usuarios.
En
los albores, fueron los foros los que crearon el maravilloso fenómeno
de poner en contacto a gente con los mismos gustos, a menudo considerados
extraños, y hacer que muchos de ellos supieran que no estaban
solos en el mundo real. Las personas nos fuimos conociendo y entablando
amistad hasta que llegó un momento en el que se demandó
un lugar para poder relacionarse mejor, sin necesidad de acceder
a los foros para comunicarse. Y llegó el chat, y con él
nuevos vínculos y mucha diversión aunque entraran
pocos usuarios. De hecho, en cierto sentido, eso ayudó a
que nos conociéramos mejor y tuvieran lugar verdaderas conversaciones,
en lugar de ser uno de esos sitios en los que todos tratan de hablar
a la vez y nadie se entera de nada. Éramos pocos, pero así
nos hicimos amigos. Más tarde, y con un nuevo afán
por conocernos, se empezaron a organizar las reuniones y, aunque
al principio eran poco numerosas, paso a paso fueron creciendo.
¿Era sólo un síntoma más de la fiebre
cyberdark.net? No, mucho más.
Todos, jóvenes y mayores, no estamos
acostumbrados a estas congregaciones y es por ello que las primeras
citas fueran reducidas. Después nos fuimos mezclando niños
y abuelos. Esporádicas, pero cuando menos entretenidas, estas
reuniones fueron delimitando pequeñas facciones de usuarios
que más tarde irían a juntarse para formar grandes
grupos de gente como los que conocemos actualmente. Y como una plaga,
el hecho se fue extendiendo por toda la página. Se crearon
foros dedicados exclusivamente a la relación y numerosos
grupos de usuarios entre los que se erigía triunfal “Kedadas”,
que vio la luz justo después de la primera quedada “oficial”,
que se sugirió en un foro y que estaba abierta a todos los
que quisieran unirse, al contrario que las primeras.
Tras esto el ritmo y el tamaño fueron
creciendo. Se establecían citas una vez al mes normalmente,
cuando todos conseguían organizarse y ponerse de acuerdo,
pero poco a poco gente que se había conocido en estas reuniones
se puso a organizar pequeñas escapadas entre cuatro o cinco
personas a razón de una por semana, como en un grupo de amigos
normal. Pronto comenzaron las nuevas demandas, y es que se quería
llegar aún más lejos y conocer a gente de otras comunidades,
algo que está en proceso. Y quién sabe si algún
día conoceremos a usuarios del resto del mundo.
Coincidimos en que es una experiencia maravillosa
y os invitamos a conocerla. Cyberdark.net ha supuesto una segunda
familia, una verdadera comunidad similar a la de las historias fantásticas
que todos los que aquí estamos leemos. Cuando llega el encuentro
y nos vemos las caras, cuando entramos en alguna tienda a hojear
libros, cuando charlamos sobre temas tan banales como las series
de televisión que veíamos en la infancia o una mala
película que nos encantó por su temática, podemos
experimentar la magia que supone el calor y la correspondencia humana.
Pero no siempre nos dedicamos a divagar como auténticos freaks,
al fin y al cabo somos personas normales que comparten una pasión
y, sí, de eso se alimenta el motor que hace marchar la máquina.
Nos podréis ver tanto merendando en un Burguer King como
en un tugurio medieval (que aunque suene épico no tiene nada
que ver, excepto en algunas cosas del servicio que se mencionan
en otra parte).
Y ayuda a superar un problema inherente a Internet.
En la web muchos tendemos a etiquetar a otros usuarios por sus mensajes
haciéndonos una imagen mental de la gente que no tiene por
qué ser la verdadera, ya sea alguien a quien respetemos mucho
o que por algún comentario nos caiga mal. Un usuario en una
quedada reciente expresó certeramente lo que cualquiera pensará
respecto a alguien de la página al que acababa de conocer:
-“me he dado cuenta de que son seres humanos”. Y es
cierto. Cuando nos conocemos en persona nos damos cuenta de que
todos son algo más que letras en una pantalla, son hombres
y mujeres con sus defectos y sus virtudes, y eso es lo mejor de
todo: darse cuenta de que puedes hablar de lo que quieras, de que
tienes un nuevo grupo de amigos que se interesan por ti, te escuchan,
te aconsejan, te preguntan... y que además comparten tus
aficiones y no te miran como a un bicho raro si empiezas a hablar
de elfos, trolls, replicantes o magia.
Acabando con el tema, nos gustaría señalar
que con este artículo además de expresar una faceta
más de la web estamos mostrando una parte de nosotros mismos,
una parte muy especial que os debemos a los que hacéis la
página, a cada uno de vosotros. Seguramente nunca llegaremos
a conocernos todos en persona pero os garantizamos que ahora cada
vez que cojamos un libro de temática fantástica recordaremos
cyberdark.net. Y es que a menudo buscamos lo que más queremos
por todos lados y recibimos palos, y no nos damos cuenta de que
los que nos alegran cada día y nos comprenden están
ahí al lado. Quizá es hora de empezar algo nuevo con
ellos, quizá es hora de hacer realidad un sueño.
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