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La Espada del Destino, de Andrzej Sapkowski
Título original:
Miecz Przeznaczenia
Traducción:
José María Faraldo
2003, Bibliópolis, La Saga de Geralt de Rivia (II)
El autor en cYbErDaRk.NeT
|
por Javier
Arnau, julio 2003
Tras la lectura e este nuevo libro de Geralt
de Rivia, casi podríamos decir que Sapkowsky nos está contando una
alegoría, o tal vez una fábula. Y digo esto porque, a partir de
elementos comunes propios de la literatura fantástica, y fácilmente
reconocibles por los aficionados al género, Sapkowsky nos cuenta
sus sentimientos, sus inquietudes, nos hace partícipes de su forma
de ver el mundo; claro, esto en manos de un filósofo, un político
o, simplemente, un escritor menos dotado, sería, cuanto menos, soporífero.
Pero como hemos dicho- y vosotros ya sabéis -, estamos hablando
de un libro de Fantasía ¿Heroica?; seguimos con las aventuras de
Geralt, el brujo mutante cazamonstruos- por dinero, aunque parece
ser que los relatos de este libro fueron escritos antes que los
del volumen anterior - El Último Deseo -.
En este segundo libro de la saga, vemos la inquietud
de los protagonistas por un mundo que se acaba; el mundo de la Naturaleza
está dando paso al del Ser Humano. Esto, de por sí, no tendría porqué
ser bueno ni malo, lo que se critíca es la forma en que se está
llevando a cabo, mediante guerras y exterminios provocados por los
humanos contra el resto de razas que pueblan el mundo, y entre ellos
mismos; o simplemente por la codicia, que lleva a los hombres a
destruir la naturaleza en busca de riquezas, ya sea directamente
(perlas en el mar, tesoros en las montañas...) como por las materias
primas que ésta proporciona (destrucción del bosque de las dríadas
por la tala de árboles madereros, etc).
Al igual que en el anterior volumen, éste recoge
varios relatos- parece ser que a partir del siguiente, ya serán
novelas propiamente dichas -. Pero al introducir personajes ya conocidos
del anterior, y utilizar a algunos de ellos en varias historias,
además de enlazar con algunos capítulos del libro anterior, el hilo
de unión entre las diferentes historias se hace más fuerte, dándole
mayor estructura de novela.
En todos los relatos/capítulos, la existencia
de los monstruos es secundaria, mero recurso para revisar el mundo
actual desde la perspectiva que dá el "verlo a cierta distancia";
futuras ciudades que reemplazarán a los poblados, razas autóctonas
que van perdiendo sus territorios (pintadas incluidas de Elfos
a las reservas ), medio ambiente creado por el ser humano, que
dá lugar a "mutaciones", nuevas razas adaptadas a ese
medio ambiente, el Progreso como fuerza antagónica del Naturalismo,
etc, etc.
Es mucho más de lo que ofrecen muchas novelas
hoy en día, sean de la temática y/o género que sean; pero es que,
además, Sapkowsky nos ofrece también aventuras, un sinfín de razas
"extrañas", peleas, amor, amistad... ¿qué más podemos
pedir?.
Y todo esto lo hace con un estilo y un lenguaje
literario directo, sin ambigüedades, a veces no apto para algunas
mentes remilgadas. En efecto; si en la vida real se maldice, se
vá al baño, se hace el amor...pues todo esto está presente en el
libro, contado con un lenguaje coloquial, "barriobajero"
a veces, que difícilmente veremos en otras obras de la llamada Fantasía
Heroica, lo que hace que lo encontremos como más cercano, más real.
Y la traducción; bien, en mi reseña del anterior
libro, El Último Deseo, dije que tal vez la traducción fuera
demasiado "cercana", muy adaptada a nuestro entorno tanto
geográfico como temporal. Pero después de un intercambio de opiniones
con el traductor, J.M. Faraldo, en la que también intervino Javier
Negrete como lector y autor de obras de fantasía, me comentaron
que precisamente ese es el estilo del autor; intercalando frases
y palabras actuales que contrastaban con el resto del texto, como
una especie de juego o, tal vez, preparatorio de ciertas "sorpresas"
futuras.
Con todo esto, la aparición de palabras como
chamullar, durillos (moneda), y otras, es un buen toque de humor,
unida a la propia del autor- que a veces se convierte incluso en
ironía).
Relato a relato:
1. -La Frontera de lo Posible. Sigue
presentándonos a personajes del libro anterior, profundizando en
sus sentimientos. Nos habla de los límites de lo posible; cada uno
tiene su propio límite... aunque no esté claro donde ponerse ese
límite.
Al igual que en los siguientes relatos, reflexiona
sobre los supuestos monstruos, que van desapareciendo por culpa
de los humanos. En este caso, los Dragones, que según uno de los
personajes, son la fuerza que impide la evolución humana- por su
culpa, no pueden agruparse los humanos en grandes ciudades, motor
del desarrollo, a su juicio-.
La historia en sí se basa en saber quién peleará
con el Dragón- Geralt lo tiene prohibido por su código, sólo está
de acompañante-, y el reparto de un supuesto botín.
Mucho humor, mucha ironía, pero al mismo tiempo
sentimientos de amor/odio, y compañerismo.
2. - Esquirlas de Hielo. Un relato de
amor, celos y envidia, en el que se demuestra que es más peligroso
el hombre para el hombre, que cualquier monstruo. La humanidad,
tanto la que Geralt cree perdida en su interior, como la general,
es la que le causa verdaderos problemas, no el monstruo en cuestión.
Aunque fue alterado artificialmente para adaptarlo al "tiempo
del hombre", creando un ser sin sentimientos que estuviera
plenamente capacitado para desarrollar su labor sin remordimientos,
Geralt sigue siendo un ser humano, aunque a veces él mismo lo dude,
y esto es lo que realmente le origina muchos de sus problemas
3. - Fuego Eterno. Igualmente, los problemas
de Geralt provienen de los humanos, en ningún momento de otras razas
ni de supuestos monstruos. Bajo la apariencia de un monstruo puede
haber un ser magnífico... y viceversa. Se potencian en este relato
escenas de la vida cotidiana, y aparecen guiños a otras novelas
del género, como esos medianos de pies peludos, enanos banqueros,
etc, etc.
4. - Un Pequeño Sacrificio. La codicia
que lleva a la guerra, el amor que nos lleva a realizar pequeños
sacrificios- o no -, sacrificios que no somos capaces realizar por
mucho que signifiquen, amor y muerte. En suma, sentimientos. Como
comentábamos en puntos anteriores, Geralt de Rivia tiene un curioso
código de honor propio, cosa común en todos los héroes de Fantasía:
Conan, Sturm Brightblade, Aragorn... , basado en no matar a ciertos
monstruos, por que:
Están en peligro de extinción; él mismo sabe
que está acabando con el mundo antiguo, al matar a los que lo defienden
frente a la barbarie del ser humano.
Son graciosos.
No causan males.
El código lo prohíbe.
Por supuesto, la mayoría de tales monstruos no
son tales, sino razas que le son molestas al hombre en su implacable
avance de progreso; sí hay razas que son monstruosas y acarrean
desgracias, pero son las menos.
5. - La Espada del Destino. Valga el último
párrafo del punto anterior para éste también. Las razas antiguas,
por su contacto con el ser humano, defendiendo el mundo antiguo,
han aprendido a ser brutales como aquellos. Así, el Mundo Antiguo
(Naturalismo) está acabado, gane quien gane.
El destino vence a la codicia, a las guerras...
¿o no?. El propio Geralt será testigo de cómo se va cumpliendo su
propio destino, aunque él luche por crearse uno propio, no estar
sujeto a uno predeterminado. En este capítulo/relato y en el siguiente
se conecta con historias del libro anterior, a través de un supuesto
destino, un camino abierto por el propio Geralt hacía tiempo. Esto
hace que vayamos adquiriendo una visión más global de la Saga de
Geralt de Rivia.
Ah, y la raza extraña son las Dríadas, una raza
que defiende el bosque donde habitan, a pesar de estar en franca
decadencia, teniendo que robar niñas humanas y utilizar a los hombres
de sementales, a la vez que demuestran que el contacto con los humanos
las ha perjudicado notablemente.
6. - Algo mas. El destino, sueños contra
realidad. ¿Qué es más real?; ¿podemos forjarnos un destino propio,
o estamos atados a la Rueda del Destino?...
Para Geralt, aunque intente negarlo y desviarlo,
el Destino existe; tal vez pueda influir en él, tal vez no. ¿Con
qué armas cuenta para ello?; amistad y agradecimiento, compañerismo,
mundo de los sueños que influyen en el mundo real- y viceversa -,
amor y muerte. Al final, el destino se vá cumpliendo. Y todo empieza
por la defensa desinteresada de Geralt de un mercader que ha sido
atacado por unos monstruos, lo que lleva al reencuentro con su madre,
con la muerte... con su destino...
En fin, un mundo mágico, con brujos, hechiceros,
razas exóticas, decenas de monstruos, enemistades, celos, incompresión,
amor, odio, y donde muy pocas cosas son lo que parecen.
Guiños a otras novelas relevantes del género
(incluso en ciertos momentos, hasta al Quijote, con la aparición
de cierto caballero que no desentonaría en la inmortal obra de Cervantes)
Con elementos clásicos de la Fantasía Heroica
(Espada y Brujería), con un uso del lenguaje no muy frecuente en
dicha corriente, un fuerte humor, ironía, e incluso a veces llegando
a la socarronería, Andrew Sapkowsky nos narra las (des)aventuras
de un cazador de monstruos que no se rige por su destino, sino que
intenta labrárselo por sí mismo, fiel a su propio código de honor
y humano, muy humano, por mucho que intente negárselo su propia
naturaleza mutada.
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