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   Por Josep Andreu

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La formación del héroe

   ¿Cómo se hace un héroe? La primera cualidad que se requiere es una cierta distancia respecto al resto de los mortales. Es por ello que los héroes suelen ser semidioses o, si son mortales, los padres originales han desaparecido hace tiempo, para ser sustituidos por un tutor. El esquema no es nuevo: lo encontramos en Arturo con Sir Ector, en Sigfried/Sigurd con Elf o, incluso, en una posterior adaptación, en Luke Skywalker con su tío.

   En ESDLA, el tutor de Aragorn es Elrond, que lo acoge en Rivendell y lo educa, o en el caso de Frodo, Bilbo. Aragorn y Frodo son huérfanos (Arathorn muere cuando Aragorn tiene sólo dos años, y los padres de Frodo también fallecen cuando Frodo es aún un niño). Gandalf participa también de esa figura de tutor, pero se distingue radicalmente de Elrond y Bilbo en que su carácter es mucho más sobrenatural, y a diferencia de los tutores que forman al héroe como persona, es decir, que lo preparan para su epopeya, el tutor sobrenatural es el desencadenante de la misma. Ejemplos no faltan: Merlín, Wotan o, modernamente, Obi Wan Kenobi son ejemplos claros de este tutor sobrenatural.

   Al margen de tutores, el héroe es per se un ser excepcional. Como los protagonistas de la tragedia, el héroe está predestinado a serlo. Gandalf formula este aspecto literalmente cuando afirma que Frodo estaba destinado a tener el Anillo, y no por voluntad del creador del Anillo. En el contexto de la Tierra Media, esta voluntad sólo puede ser la de Eru, que es en todo homologable al destino, por cuanto uno no se puede oponer a ella. Por su parte, Elrond le dice a Aragorn. "Un gran destino te espera, sea el de elevarte más alto que todos tus antepasados desde los días de Elendil, o caer en la oscuridad con todos los sobrevivientes de tu especie" ¿Qué hace Elrond sino cumplir la misma misión que tantos y tantos mensajeros de la divinidad a los humanos? Y el héroe responde normalmente a las expectativas: para Gandalf, Frodo es el mejor hobbit de la Comarca, mientras que Aragorn se convierte en "el más intrépido de los Hombres vivientes, hábil en las artes y versado en las tradiciones de ellos, y más que todos ellos"

 

Las dos torres

 

   Finalmente, un héroe necesita aventuras para serlo: la heroicidad es el resultado de actos determinados en circunstancias concretas. Así, una vez el futuro héroe se ha convertido en adulto y ha recibido el impulso de su tutor, debe abandonar el mundo en el que ha crecido para emprender su misión y alcanzar así el status de héroe. Este abandono del mundo se representa a menudo en la desaparición o muerte del tutor (Sigurd) o bien su renuncia a su papel como tal (caso de Arturo con Merlín). Tolkien usa ambos sistemas: Elrond renuncia a su tutela sobre Aragorn mientras que Bilbo desaparece de la vida de Frodo.

   Y ya tenemos a nuestro héroe preparado para embarcarse en aventuras. Sin embargo, Tolkien se acoge a los modelos épicos antiguos no al estándar de Hollywood, y en esos modelos el héroe solitario no es con mucho tan frecuente. Pensemos si no en Jasón y los Argonautas o Arturo y sus caballeros. Incluso aquellos héroes que no tienen compañeros permanentes reciben ayudas sin las cuales no podrían haber completado su misión. La pregunta es ¿quién acompaña al héroe?

Los compañeros del héroe

   El plural es intencionado: si un héroe solitario no es lo más habitual, en las sagas antiguas es aún más raro el héroe con un solo compañero. Podría pensarse que el grupo formado por el héroe y sus compañeros es un reflejo a escala reducida del panteón divino.

   Lo más normal es que el primer compañero del héroe sea el tutor que le ha impulsado a la aventura. En el caso de ESDLA está claro: Gandalf actúa así con Bilbo, con Frodo y con Aragorn, aunque en el caso de Frodo Tolkien da un hábil giro a la trama: Gandalf le habría acompañado desde el principio pero se lo impiden. Por tanto, el tutor no sólo sirve como detonante del cambio sino como conductor del mismo y, como el Virgilio de Dante o Anubis en los mitos egipcios, guía al héroe por su camino a la iluminación. Esta figura de la divinidad protectora que guía al héroe es prácticamente universal; aparte de los mencionados cabe destacar al centauro Quirón, tutor de Hércules, o a Tetis, madre divina de Aquiles. Y, por supuesto, modernamente no podemos dejar de mencionar a Aldus Dumbledore, que resulta en muchos de sus rasgos muy, muy parecido a Gandalf.

   Finalmente, cuando el héroe alcanza la madurez, puede dejar a este tutor. Este punto en la carrera del héroe corresponde normalmente a un conflicto, a una superación de dificultades. Así, Aragorn decide cabalgar por los Senderos de los Muertos después de doblegar la voluntad de Sauron, mientras que Frodo abandona la Comunidad después de la lucha interior en Amon Hen. Vemos también cómo el carácter de esta superación es distinto según el tipo de héroe: el héroe restaurador -Aragorn- vence a un enemigo exterior evidentemente físico, que se manifiesta ante él (como Arturo vence a Mordred) mientras que el héroe sacrificial -Frodo- vence a un enemigo interior o, al menos, de carácter mucho más espiritual que el anterior (pensemos en los cuarenta días de ayuno de Jesús y en su victoria sobre Satán).

 

La captura de Gollum,
por Alan Lee

 

   Pero si el héroe tiene una divinidad protectora que le enlaza con el mundo divino, debe tener también un compañero que le recuerde su lado más humano (el héroe compagina ambos aspectos). Sin duda, el personaje de Tolkien que más cumple esta función es Sam Gamyi. Tolkien reconoció que Sam estaba modelado en los campesinos de Sarehole y en los tommies que tuvo bajo sus órdenes en Francia: hombres sencillos que marchaban a la muerte no porque tuvieran ideales elevados, ni sed de gloria, o fueran presas de la desesperación, sino simplemente porque consideraban que eso era lo que tenían que hacer. Merry y Pippin comparten también en parte estas características de Sam, aunque atenuadas por su origen aristocrático, e incluso el mismo Frodo y Bilbo tienen en ellos algún rasgo de este compañero arquetípico del héroe con respecto a Gandalf y Aragorn.

   Sin duda, esta figura no tiene tanto glamour como los personajes elevados que protagonizan los relatos épicos, pero su apego terrenal contribuye por contraste a resaltar el carácter especial del protagonista. Encontramos antecedentes de esta figura en Sancho Panza, pero también en el Papageno de La Flauta Mágica, el Falstaff shakesperiano e incluso en algunos relatos de los viajes de Odín con Loki. Conviene observar que casi todos estos personajes son cómicos. Ello no es sorprendente: del mismo modo que los griegos inventaron la comedia como el reflejo más mundano de la tragedia, el compañero es en realidad un reflejo mundano del héroe, o incluso podría decirse que es la parte humana del héroe y, a diferencia del tutor sobrenatural, le acompaña por lo general siempre, aún cuando ha alcanzado su madurez.

   ¿Y Aragorn? Sus compañeros son claramente Legolas y Gimli. Desde que la Comunidad parte de Rivendell, Legolas y Gimli no se separan de él hasta que Sauron cae. Podría pensarse que Legolas, por sus características de inmortalidad y distanciamiento de los humanos, no comparte ese aspecto mundano del compañero del héroe, pero su apego a la Tierra Media (algo habitual entre los Elfos que no han habitado en Valinor, por otra parte) le permite funcionar igual que un campesino que añora su terruño.

   Nos queda aún otro tipo de compañero del héroe, al que me permitiré llamar el héroe caído. El héroe caído se ha enfrentado a los mismos retos que el héroe, pero ha fracasado y, normalmente, lo acaba pagando con la vida. Sin embargo, esta situación no corresponde al pensamiento cristiano de Tolkien, que introduce una posibilidad de redención para este personaje, aunque casi siempre perezca en el proceso. En ESDLA Boromir y Gollum/Sméagol son claramente héroes caídos, ambos por la misma razón: el terrible poder corruptor del Anillo. Este currículum vitae de fracaso y redención no se encuentra por lo general en las sagas paganas, ya que el tema de la redención es típicamente cristiano: de hecho, podría considerarse a San Pedro como un héroe caído: fracasa (niega a Cristo), pero se redime de su fracaso y alcanza un status casi igual al del héroe, pero a costa de su vida. Y si no hay antecedentes en las sagas clásicas, sí que hay "descendientes". ¿Qué otra cosa es si no Darth Vader en Star Wars?

El viaje

   La mayoría de las sagas muestran al héroe embarcado en un viaje de búsqueda de un objeto, sea éste el Vellocino de oro griego, el Santo Grial Artúrico o el Sampo del Kalevala. Este viaje físico es siempre el reflejo de un viaje interior en busca de la iluminación, y las penurias físicas del héroe en su esfuerzo por llegar a su destino se corresponden con las penurias anímicas que se pasan por alcanzar la apoteosis. Ciertamente, Tolkien introduce un cambio: el viaje no pretende conseguir un objeto sino deshacerse de él, pero este cambio no afecta para nada a los motivos del héroe para emprender el viaje, sus peripecias durante él, y las consecuencias tras llegar a destino. El objeto sigue siendo el leit motiv del viaje físico, mientras que las implicaciones espirituales del objeto lo son del viaje interior.

   El viaje suele transportar al héroe -y a sus compañeros- de su hogar, que simboliza al mundo conocido, a una tierra mítica. Así, el viaje a las Islas de Occidente, tan frecuente en la literatura épica irlandesa, o La Odisea, paradigma del relato de viajes clásico, o el viaje de Hércules a los infiernos para concluir sus Trabajos, la expedición a Pohjola en el Kalevala, o el viaje a Jotunheim de Thor de los mitos nórdicos. Se trata en todos los casos de pasar del mundo del héroe, que por extensión es el de los humanos, a un mundo distinto, morada de los muertos, los gigantes u otros seres míticos, cuya climatología es generalmente hostil con el fin de reflejar que no es el mundo en que los hombres debieran estar. Esto puede verse a las mil maravillas en el viaje de la Comarca a Mordor; es decir, de un sitio hecho por y a la medida de los hobbits a otro donde nadie en su sano juicio querría vivir. Este viaje actúa también como símbolo del tránsito del héroe de un plano de conciencia mundano a un enaltecimiento que conduce a la apoteosis.

   En su periplo al estado sobrehumano, el héroe pasa por diversas etapas, que suelen estar claramente marcadas. El ejemplo más antiguo, y maravillosamente claro, es el viaje de ultratumba que se relata en el Libro de los Muertos egipcio. No pretendo decir que Tolkien se inspirara en los manuscritos egipcios, sino mostrar como esta idea del viaje por etapas es algo sumamente extendido en los mitos, y comprende los trabajos de Hércules, los viajes de San Brandán, los de Maeldun o, incluso, salvando las distancias, el viaje de los judíos por el desierto (con las lembas como un equivalente del maná) o el via crucis de Jesús. Tolkien marca muy bien las etapas del viaje: todas concluyen con la llegada a un lugar donde los viajeros pueden reponerse para seguir el viaje y también sufrir cambios que les ayuden a continuar: Cricava, la casa de Tom Bombadil, el Poney Pisador, Rivendell, Lothlorien, Fangorn, Edoras, Ithilien o Minas Tirith y la vuelta a la Comarca son evidentes. Menos evidente, aunque sí supone un cambio muy claro para Frodo, es la torre de Cirith Ungol, donde el Portador descubre que ya no puede dejar el Anillo, en una escena muy emotiva con Sam.

   Imitando también a las sagas clásicas, Tolkien plantea un viaje de ida y vuelta. La estructura circular es tan evidente que no sólo la composición del grupo de viajeros es la misma al principio y al final (los cuatro hobbits), sino que también lo son muchas etapas y los puntos en que el grupo sufre cambios (notablemente Bree: los hobbits llegan a Bree solos a la ida, y parten de Bree solos a la vuelta). Sin embargo, el viaje no es un círculo, sino una espiral. Los hobbits no vuelven al mismo lugar que dejaron (y de ahí el Saneamiento de la Comarca) y no son los mismos que salieron de la Comarca. Gandalf lo dice explícitamente antes de irse a hablar con Bombadil: "habéis crecido mucho en verdad".

El objeto numinoso

 

Anillo único

 

   Curiosamente, en epopeyas dedicadas sobre todo a contar las hazañas de personas, el eje argumental que sostiene la trama es un objeto. No se trata sin embargo de un McGuffin al estilo cinematográfico, es decir, de un mero pretexto para contar historias, sino de un objeto cuyas características son hasta tal punto esenciales para la historia, que muchas veces incluso la determinan: aunque pasivo, el objeto numinoso es un protagonista más de la Historia. El Anillo de Tolkien es así un sucesor del Anillo de los Nibelungos, el Sampo del Kalevala o el Santo Grial artúrico.

   Sin embargo, el objeto más emparentado con el Anillo tolkieniano es su homólogo nibelungo, no ya por su forma y materiales comunes, sino por el hecho de que ambos tienen una influencia corruptora en su poseedor. Esta influencia proviene del legítimo dueño del anillo (Sauron/las doncellas del Rhin). También en ambos casos el creador pierde el objeto, lo que sirve como arranque de la historia, y ésta termina con la desaparición del objeto del mundo de los humanos, bien sea por destrucción física (caso de Tolkien) o por la vuelta al mundo sobrenatural del que procede (caso de la saga de los Nibelungos). La desaparición del objeto conlleva la restauración del orden perdido.

   El Grial y el Sampo son conceptos opuestos a los Anillos. Su presencia en el mundo de los humanos trae la paz y la prosperidad, y el período en que están ausentes acarrea toda clase de miserias, lo que provoca una expedición de los héroes para recobrarlo. Con todo, el Anillo de Tolkien comparte con estos objetos algo que no tenía el anillo de los Nibelungos: su poder prácticamente universal, aunque en este caso reconvertido en un poder para el mal. Aquí se refleja el pensamiento cristiano de Tolkien. Si el mundo lleva en sí el pecado, el poder de dominio del mundo es malvado. El Sampo y el Grial, por su parte, son objetos de fuertes bases paganas, y en consecuencia ignoran por completo el concepto de pecado original, que es tan importante en Tolkien.

   El Anillo es, pues, básicamente una materialización física del pecado del mundo, y su destrucción limpia el mundo de ese mismo pecado: nótese que con la destrucción del Anillo desaparecen Sauron y los Nazgul, que son los últimos vestigios del mal puro, inhumano, encarnado físicamente sobre la Tierra Media, mientras que se restaura el Reino de Gondor, en una vuelta a una antigüedad idílica que ya se consideraba perdida, como el Paraíso bíblico. Por otro lado, Frodo -un héroe sacrificial- queda tan hundido por la ordalía que pierde incluso la voluntad de vivir. Las semejanzas con el Cordero de Dios, que con su muerte quita el pecado del mundo, son obvias.

El conflicto

   Nos queda aún el último elemento en la definición del héroe: la superación de obstáculos. De hecho, podría argumentarse que la razón última del viaje es enfrentar al aspirante a héroe a los obstáculos que le permitirán alcanzar el estatus heroico. En la naturaleza de los obstáculos y en cómo los superan podemos distinguir claramente al héroe restaurador del sacrificial.

 

En la guarida de
Ella-Laraña, por Alan Lee

 

   Así, Aragorn no sufre ni un rasguño, pese a estar en las batallas del Abismo de Helm, Pelargir, los Campos del Pelennor y la Puerta Negra; enfrentarse a los Jinetes Negros, los orcos de Moria, los huargos en Eregion (Acebeda) y cruzar los Senderos de los Muertos. Se le presenta como un rival al que muchos enemigos ni siquiera se atreven a enfrentarse. Sin embargo, Frodo es acuchillado por el Rey Brujo, golpeado por un jefe orco en Moria, envenenado por Ella-Laraña y mordido por Gollum. Las diferentes peripecias de ambos héroes se justifican plenamente por el carácter de héroe restaurador de Aragorn y sus predecesores, que están asociados al Sol en su plenitud, mientras que Frodo es un héroe sacrificial, como el Sol que muere y renace para dar nueva vida.

   Pero no todo en Frodo son derrotas. Si bien cuando sucumbe a su debilidad sufre, también es capaz de salir victorioso cuando se sobrepone, aun frente a enemigos poderosos: al enfrentarse al Tumulario o a los Jinetes Negros en el Vado de Rivendell, al quitarse el Anillo en Amon Hen, al abandonar la Comunidad... pero todos estos triunfos que son básicamente de Frodo sobre sí mismo, están exentos fundamentalmente de acción física, son espirituales, y el resultado suele ser la liberación de Frodo de algún dominio sobre él, más que la destrucción del enemigo.

   De igual modo difieren los cambios que provocan en el héroe los conflictos. Mientras que a Aragorn cada victoria le acerca a su conversión en Rey, mostrándolo como un capitán más astuto, un líder más valiente o un hombre más sabio, a Frodo cada conflicto le acerca más al sacrificio definitivo: su vida. Tolkien omite presentarnos este sacrificio de forma explícita, y lo transforma en un viaje a Occidente, pero dado que en la mayoría de mitologías el viaje a occidente es el viaje al reino de los muertos, quedan pocas dudas sobre el sentido de la partida de Frodo de los Puertos Grises.

   Vemos pues cómo los conflictos acercan al héroe a su apoteosis. Y de igual modo que los conflictos de ambos tipos de héroes son distintos, sus apoteosis también lo son. Así, Aragorn restaura el esplendor de los Días Antiguos: hay de nuevo Rey en Gondor y en Arnor -la coronación de Aragorn por Gandalf recuerda claramente a la de Carlomagno por el Papa-, el mal encarnado ha desaparecido del mundo, la alianza con Gondor se renueva, el Árbol Blanco vuelve a florecer... todo es triunfo, todo es volver a un pasado esplendoroso, como el retorno de la Edad de Oro griega... pero no para siempre. El Reino de Gondor bajo Aragorn tiene para nosotros, lectores de este nuestro cínico y desengañado mundo, todo el aire crepuscular de la última llamarada antes de que el fuego se apague. Este fin del mundo es evidentemente un eco del crepúsculo de los dioses nórdico, aunque al mismo tiempo, la influencia cristiana que hizo aparecer un nuevo mundo tras el Ragnarok se manifiesta aquí por boca de Legolas: "Y la semilla yacerá en el polvo y se pudrirá, sólo para germinar nuevamente en los tiempos y lugares más inesperados". Esto es prácticamente una transposición a la Tierra Media de la parábola del grano de trigo de los Evangelios.

   Pero si el clímax de Aragorn corresponde, por decirlo así, al Jesús resucitado del Domingo de Pascua, Frodo se identifica mucho más con el de Viernes Santo. Su imagen no es la de un héroe victorioso, sino más bien de alguien que ha sido vencido por completo: con el cuerpo y el alma envenenados, la mente corroída por el Anillo, y derrotado por su inmenso poder, Frodo es totalmente vencido en la Grieta del Destino; físicamente por Gollum, que le quita el Anillo, y mentalmente por el propio Anillo. Sin embargo, de este clímax de derrota absoluta, Tolkien saca una victoria. Curiosamente, esta victoria es debida a Frodo, el héroe derrotado. Frodo vence no por sus actos en la Grieta del Destino (Tolkien deja muy claro a lo largo de la historia que NADIE podría vencer al Anillo en tales circunstancias), sino por sus actos anteriores: más concretamente, por su decisión de perdonar la vida a Gollum (decisión que también toma Sam momentos antes del clímax definitivo). Es una victoria alcanzada no por la acción, sino por la inacción, por no hacer algo que Frodo podría hacer, que incluso ha deseado hacer, pero que siente que no es lo que debe hacer. Su actitud es similar a la de Jesús que deja que lo crucifiquen, pese a poder evitarlo si lo quisiera. Prueba de esta vinculación es el hecho de que Frodo, pese a no morir tras esta terrible prueba, ha perdido por completo la voluntad de vivir: está desnudo y tiene que ser sacado por Sam de la Grieta del Destino. En esos momentos es poco más que un trozo de carne. Salvo por el hecho de que respira, se le puede considerar prácticamente como un cadáver, puesto que no hay voluntad en él. Aunque no su vida, Frodo ha sacrificado su fuerza vital.

El mundo tras la edad heroica

 

El retorno del rey

 

   Pese a que el clímax de la obra se alcanza entre la destrucción del Anillo y la boda de Aragorn, Tolkien no acaba su novela ahí. Eso sería un final de cuento, que no es lo que pretendía Tolkien. En ESDLA está construyendo una parte de sus mitos, no un cuento. Una parte muy importante, además, puesto que marca el paso de una edad llena de maravillas, donde se ven en la Tierra prodigios y horrores de escala sobrehumana, a una Edad de los Hombres, en la que todo el mundo se adecua a la escala humana. De ahí la necesidad del final de El Señor de los Anillos, con la pérdida de la inocencia en el último lugar libre de mal que se plantea en El Saneamiento de La Comarca, y el telón, digno émulo del Gotterdämmerung nórdico, de la historia de Aragorn y Arwen.

   Aquí, Tolkien no sólo toma como fuente la mitología nórdica en el tema del ocaso de los Dioses, sino también los mitos artúricos (con el viaje de Arturo a Avalon o la partida de Merlin) o el final del Kalevala, con la partida de Vainamoinen hacia Occidente, que tiene un claro paralelismo en todo el episodio de los Puertos Grises, sobre todo en la partida de Elrond y muy especialmente de Gandalf: los héroes míticos abandonan la Tierra Media para no volver jamás a ella, y, con su marcha, se acaban los Días Antiguos.

   El Saneamiento de la Comarca podría incluso plantearse como el primer conflicto de esa nueva era. Todo el episodio tiene un carácter muy distinto al de los demás conflictos de El Señor de los Anillos. Aquí no hay magos poderosos -Saruman ya es sólo una sombra- ni héroes sobrehumanos. Hay maldad, sí, pero es una maldad de escala humana, mezquina pero comprensible para los hombres, y muy lejos de la apabullante malignidad de personajes como Sauron. Unos seres tan mundanos como los hobbits derrotan a un grupo de malhechores por medios enteramente terrenales. Esto es la antítesis de la Guerra del Anillo, y su carácter casi doméstico se nota especialmente en la comparación. El hecho de colocar el episodio al final del libro, justo antes de la partida de los Puertos Grises, sirve para mostrar el nexo entre los Días Antiguos y los Días de los Hombres.

   Y finalmente, y casi a título personal, recordar la última escena de ESDLA, justo antes de los apéndices: la vuelta de Sam a casa, con su familia y la cena esperándole. No hay fanfarrias, ni hermosas princesas. Es un final corriente para un hombre corriente. El tiempo de los héroes ha pasado, aunque... ¿quién sabe cuándo podría volver?

Bibliografía

Fuentes Primarias:

Tolkien, JRR - El Señor de los Anillos (3 vols), 4ª Edición Ed Minotauro, 1980. ISBN 84-350-0201-2

Tolkien, JRR - El Señor de los Anillos (apéndices) 1ª edición. Ed Minotauro 1987. ISBN 84-450-7070-3

Tolkien, JRR - Cuentos Inconclusos vol 1. 1ª edición, 4ª reimpresión. Ed. Minotauro, 1990. ISBN 84-450-7079-7

Tolkien, J.R.R. - Cuentos Inconclusos vol 2. 1ª edición . Ed. Minotauro, 1989. ISBN 84-450-7108-4

Tolkien, J.R.R. - Cuentos Inconclusos vol 3. 1ª edición . Ed. Minotauro, 1989. ISBN 84-450-7146-7

Tolkien, J.R.R. - El Silmarillion, 1ª Edición. Ed. Minotauro, 1984 ISBN 84-350-0428-7

Tolkien, J.R.R. - El hobbit. 2ª edición. Ed. Minotauro, 1982. ISBN 84-350-0350-7

Tolkien, J.R.R. - The Book of Lost Tales 1. 1ª edición. Ballantine Books, 1992. ISBN 0-345-37521-1

Tolkien, J.R.R. - The Book of Lost Tales 2. 1ª edición. Ballantine Books, 1992. ISBN 0-345-37522-X

Tolkien, J.R.R. - The Lord of the Rings. Harper-Collins, 1993. ISBN 0-261-10243-5

Fuentes Secundarias:

Tolkien. J.R.R. - Los Monstruos y los Críticos y Otros Ensayos. 1ª Edición. Ed. Minotauro, 1998. ISBN 84-450-7097-5

Grotta, D, - J.R.R. Tolkien, una biografía, 1ª edición. Ed. Planeta, 1982. ISBN 84-320-3615-3

Sagrada Biblia - 10ª edición. Ed. Herder, 1970

Foster, R. - Guía completa de la Tierra Media, 1ª edición. Ed. Minotauro, 1999. ISBN 84-450-7110-6

Chadwick, N. - The Celts. Penguin Books, 1997. ISBN 014-02-5074-3

Roesdahl, E. - The Vikings. Penguin Books, 1998. ISBN 0-14-025282-7

Rolleston, T.W - Celtic Myths and Legends. Random House 1994. ISBN 1-8598-006-8

Walker, M - Los egipcios. M.E. Editores, S.L 1995. ISBN 84-495-0174-1

Anónimo - El Kalevala. 1ª ed. Ed. Losada, 1999. ISBN-950-03-9024-8

Frazer, Sir James - The Golden Bough.Wordsworth Editions Ltd 1993. ISBN 1-85326-310-9

Harris, M. - Vacas, cerdos, guerras y brujas. 12ªedición. Alianza Editorial. 1991. ISBN 84-206-1755-5

 

@2003 Josep Andreu para cYbErDaRk.NeT
Prohibida la reproducción sin permiso expreso del autor

    

2004-06-10 23:29   Nycteris
En fin ya termine mi memoria y la entrego este viernes. A ver como va me con eso.

A los interesados en mitologia les recomiendo:
Cualquier libro de Joseph Campbell, eminencia sobre el tema, en especial "El Heroe de las mil caras, sicoanalisis del mito" y "El poder del mito" (en dialogo con Bill Moyers. Este ultimo muy interesante ya que toca muchisimos temas, entre ellos el concepto mitologico tras Star Wars (Cambpell fue asesor de Lucas). Al igual que Mircea Eliade, este ultimo con muchisimo material.

A durandal y a Phil Resh, se les interesa les puedo enviar una copia de mi memoria de titulo acerca de Tolkien y las Sociedades Tolkien..

2004-06-04 22:58   eter
Muy interesante, pedazo de artículo.
Analisis objetivo de los heroes desde el punto de vista de ESDLA principalmente. Algunas comparativas son muy reveladoras e interesantes.
2004-03-17 21:43   Comfortably Numb
Bastante completo el artículo, biográfico y muy explicativo, es mucha información.

Saludos.
2004-01-11 23:51   Cyram
La verdad es que me ha parecido realmente interesante el artículo. No creo que se pudiera mejorar. Me ha gustado mucho. ¡¡Muchas gracias por ponerlo!! ;) muy bueno, de veras que si.
2004-01-11 21:22   EridaniX
Enorme. Tan bueno como claro y conciso. A destacar la influencia del catolicismo, que muchos desconociamos, en la obra de Tolkien.
Un saludo.
2004-01-04 02:15   CeNedra
Absolutamente sublime.

2003-11-28 19:31   durandal
Hola a todos, soy cubano, acá en Cuba solo tenemos publicados El hobbit y El señor de los Anillos que han sido éxitos editoriales. Me he quedado encantadísimo sobre lo que diserta este escritorazo sobre Tolkien. Enhorabuena!!! Soy graduado de LETRAS de la Universidad de acá e investigo a Tolkien. Si cualquiera de los interesados en las temáticas tiene cosas que aportarme por favor escriban, en mi país carecemos de esas publicaciones importantes. ronald@csh.uo.edu.cu

Ronald
25 años
Cuba
2003-11-26 10:51   Phil Resch
Hola a todos, y gracias por los elogios.

Para los interesados en mitos, os aconsejo este enlace:

www.myths.com/pub/myths/myth.html

Que contiene montones de enlaces a mitologías de todo tipo.

2003-11-25 14:08   Harabek
A mis ojos un muy buen articulo, tanto por la referencias a mitos externos ocmo por lo comentado sobre la obra en si.

Por cierto alguien sabe de alguna pagina web sobre mitos o un buen libros donde vengan, es que como dubhe tambien ha dicho con este articulo me han dado ganas de saber más sobre leyendas y seres fantasticos.
2003-11-25 02:41   dubhe
Vaya! Además de leer lo que me falta de Tolkien me han entrado ganas de profundizar más en mitologías variadas. La bibliografía que muestras me interesa. Si fuera una hora más normal iría corriendo a la biblioteca...
2003-11-23 21:16   cebra
Este es el articulo que a mi me habria gustado escribir... si supiera tanto del tema como Josep, algo realmente dificil. De lo mejor que he leido sobre Tolkien incluido a "clasicos reconocidos" como Shippey, Carpenter o Pierce. Ojala que Jackson hubiese contado con Josep para hacer las pelis, seguro que las cagadas hubieran sido menores.
2003-11-19 20:41   Nycteris
El articulo esta conciso y claro como pocas veces he visto. Me gustaria contactar al autor a fin de pedirle permiso para citarlo en mi memoria de titulo que justamente trata del tema (aunque este es solo una parte). Concretamente es una etnografia a la Sociedad Tolkien que hay en mi pais, Chile.

Como detesto personalmente el copypaste me parece que esta es la forma de hacer las cosas.. Agradeceria que me contactara por mensaje privado..
2003-11-11 07:16   alwar
Excelente artículo Phil, quedé impresionado de lo bien que conoces la obra de Tolkien y mejor dicho los antecedentes. Algo ya se habia discutido en el post de fantasía pero tu nos diste una visión mas amplia del tema, ojalá algunos se animen a entrar al post a ampliar mas

Me hubiera gustado que ahondaras más en el tema del anillo de los nibelungos, pero aun asi me pareció muy buen análisis. Yo estoy preparando un pequeño ensayo sobre el anillo de los nibelungos de wagner, aunque no se si cyberdark sea el foro adecuado para ponerlo, si no pues lo pondré en mi página personal.

Felicidades, que bueno que haya gente que le guste escribir cosas interesantes.
2003-10-31 20:12   odrade
un articulo absolutamente impresionante, se nota que esta currado y te enseña todo lo que quieras saber sobre Tolkien y sus obras, e incluso un pelin mas
2003-10-31 09:22   Antares
Un delicioso articulo, ameno y muy educativo, me divirtio mucho leerlo.
2003-10-31 00:26   Nicole
Me ha gustado mucho el artículo, y lo encuentro muy completo e informativo. También muy trabajado.
Gracias, ha sido un placer leerlo y un placer aprender leyéndolo :)
2003-10-30 03:44   Kronos
Ecxelente tu analisis, a mí me habían dicho que Tolkien en sus cuentos le ponía ciertos matices Cristianos, no tenía idea de que fuese un profundo Católico, yo también lo soy.
A mí precisamente me habían dicho que muchas de estas novelas siempre tocaban cosas completamente contrarias a la Fe Crisitiana...
Pero veo que esas son opiniones de personas ignorante, carente por completo de concomientos, históricos, mitologícos, etc....

Voy a ver si me consigo esos benditos tres libros, para leer la saga de Tolkien
2003-10-29 22:59   Kraken
Felicitats nen, t'hi has lluit.

Con el bagaje que tienes y tu biblioteca tendrías que pensar en realizar más artículos... tal vez alguno sobre Terry Practhett? ;-)
2003-10-29 11:40   Dybbuk
Un muy buen artículo, muy bien narrado, detallado y curioso. Se nota que hay un gran trabajo de investigación detrás.
Además de ciertas curiosidades que no conocía, y que considero muy interesantes, me gustó sobre todo la segunda parte, me pareció la más trabajada.
2003-10-29 02:23   Runa_Oscura
un tremendamente sesudo analisis, digno de cualquier revista especializada, y con mayor razon de esta pagina, tremenda la forma en que se establecen las relaciones y se esclarecen algunas (a falta de mejor palabra) metaforas, obligado para cualquier Tolkeniata que se precie de serlo... yo no lo soy, pero eso no quita que el articulo me halla dejado llorando y de rodillas...

amen
2003-10-29 00:51   vorkosigan
¡Casi me he quedado sin palabras!, con la boca abierta si..
Me he quedado maravillosamente encantada con un "pezazo" de articulo impresionante. Enhorabuena
2003-10-28 18:16   db105
Aunque me encanta ESDLA, no soy un gran fanático de esos que se saben toda la vida y milagros de Tolkien, de manera que no soy el más indicado para opinar sobre los aciertos o fallos del artículo. Todo lo que puedo decir es que me ha resultado muy interesante leerlo.
2003-10-28 15:40   Belgarion
Gran articulo ¡¡Si señor!!
2003-10-28 12:41   Starhawk
Un artículo magnífico, aunque a mí lo que más me ha gustado ha sido la segunda parte, biografías de Tolkien hay tantas que ya creo estomagan un poco...

Pero la segunda parte es uan verdadera delicia, interesantísimo y desde luego, aclara muchas ideas respecto a la formación del mundo de Tolkien.

Enhorabuena Phil, peaso de articulista.

Queremos más eh?
Saludos
2003-10-27 21:23   Adambar
Muy muy interesante, ameno y hecho con gusto .Se nota la mano de Phil, siempre acertado y directo.
" Sin duda un placer para los ojos "

Un saludo.
2003-10-27 19:24   Cyric
Muy buen artículo.
Me ha encantado y me ha ayudado a conocer un poco mejor de donde proviene el estilo de Tolkien, a conocer su obra y sus fuentes de inspiración (consciente o inconscientemente).
2003-10-27 19:22   Galadriel*
Estimado Phil:

Me postro a tus pies.


Atentamente,

Gala.
2003-10-27 18:50   Lilibel
Excelente artículo, rara vez uno encuentra algo así....
2003-10-27 16:11   yarhel
Un artículo magnífico. Lo que más me ha gustado, el análisis de las fuentes de Tolkien y el origen de muchas de las ideas y mitos del mundo que creó. Completo y fascinante. Enhorabuena.
2003-10-27 15:22   iarsang
Impresionante.
Un pedazo de artículo. Un análisis muy detallado. Había oído siempre mencionar la influencia del catolicismo en la obra de Tolkien pero nunca la había visto tan bien presentada y argumentada; al margen de estar de acuerdo o no en todas las semejanzas planteadas.
Enhorabuena y gracias por este artículo.