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por Enric Quílez

CYBERPUNK

   Y llegamos finalmente al subgénero más reciente de cuantos encontraremos a día de hoy en las clasificaciones más conservadoras. Pero si alguien es capaz de dar una definición satisfactoria de cyberpunk, le estaré eternamente agradecido. El término fue acuñado por Bruce Bethke para referirse a todas aquellas obras nacidas a raíz de Neuromante, de William Gibson, y que posteriormente ha ido adquiriendo una personalidad muy marcada.

   Intentémoslo, de todas maneras:

   Cyberpunk es aquella ciencia ficción ambientada en un futuro generalmente no muy lejano, con omnipresencia de ordenadores y de otros elementos que conforman el cyberespacio (implantes cyborg, conectores mente-ordenador, realidad virtual, redes de información), en un mundo generalmente superpoblado, desestructurado, muy capitalista, en el que impera la ley de la selva y con una estética muy a lo Blade Runner (neones, coches voladores, masas, contaminación, megápolis). El personaje suele ser un anti-héroe, con problemas de personalidad, individualista a horrores, dotado de un sentido de la ética muy personal y que domina los ordenadores que no veas.

   En general, las tramas se acercan bastante a la novela negra y los personajes suelen ser bastante marginales. Algunos críticos han dicho sobre El Movimiento (que también se llama así) que ha acabado con la ciencia ficción especulativa, pues ha situado todas las tramas en un futuro cercano. Tal vez sea exagerado, pero tampoco deja de tener su parte de razón.

 

   El cyberpunk aparece a raíz de una obra rompedora y no por todos igual de apreciada, tras la cual las cosas no volverían a ser lo mismo: Neuromante, de William Gibson, publicado en 1.984, ese año tan orwelliano. Y es que en algo tenía que notarse la revolución informática. El cyberpunk bebe también en las fuentes de la New Wave y suele ser bastante pesimista con el futuro que nos aguarda. A diferencia de otros subgéneros aquí no se critica a los ordenadores o la automatización de la sociedad. Simplemente se dan por supuestos y se obra en consecuencia.

   Prácticamente toda la producción de Gibson se encuentra en este género (Conde cero, Mona lisa acelerada, Luz virtual, Idoru y Todas las fiestas del mañana.) En la recopilación Quemando cromo encontramos, entre otros grandes relatos, Johny Mnemonic, llevado al cine hace unos años.

   También es cierto que los precedentes pueden encontrarse en muchos lugares. Los hay que ven en Los jinetes de la antorcha, de Norman Spinrad, un origen del cyberespacio. Otro curioso precedente lo encontramos en Nunca digas buenas noches a un extraño, de Rafa Marín, que a partir de una estructura deudora de la novela negra nos ponía en un futuro oprimido donde una supercomputadora mantiene la estructura de un país y policías robóticas causan el terror por las calles. En cuanto a mundos superpoblados cuesta no mencionar ¡Hagan sitio! ¡Hagan sitio! de Harry Harrison, llevada posteriormente al cine como Soylent Green y que ya prefiguraba la estética de mundo superpoblado y enfermo. Hay que decir que película y libro son bastante diferentes y que un caso parecido lo encontramos en la madre de todas las películas cyberpunk: Blade Runner, que es mucho más que el libro de Philip K. Dick en que está basado (¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?)

   La estética es un elemento fundamental en este subgénero. Así, es el único en que genuinamente podemos hablar de una estética propia: la cyberpunk, tan bien definida en Blade Runner. Y es que la revolución informática también se ha dejado notar en el cine y es normal que se refuercen mutuamente.

   El cyberpunk ha sido cultivado por muchos autores a parte de Gibson. Otro de los prolíficos ha sido Bruce Sterling en El fuego sagrado y Distracción. En Islas en la red exploraba uno de los temas en los que se ha centrado Criptonomicón: los modernos paraísos "fiscales" del mundo cyberpunk.

   Podemos citar también Hardwired (Walter Jon Williams), Pequeños héroes (Norman Spinrad), Metrófago (Richard Kadrey) y "Ora:cle" de Kevin O'Donnell, así como el relato Un jinete solitario, de Rodolfo Martínez.

Aunque posiblemente una de las más logradas novelas sea Cuando falla la gravedad de George Alec Effinger en la que, para variar un poco, la cultura dominante es la árabe. Eso sí, los bajos fondos son los bajos fondos igualmente. Este mundo fue continuado con Un fuego en el sol y El beso del exilio.

   Tras la primera oleada aparecen nuevos temas y nuevos enfoques. La primera de las novelas de este nuevo cyberpunk tal vez sea Ambiente, de Jack Womack, que está influyendo poderosamente sobre todo en el cine. Más recientemente aún tenemos dos obras de Neal Stephenson: el delicioso y refrescante Snow Crash, que sublima todos los componentes de la corriente, y La era del diamante, que la trasciende completamente. Aunque el verdadero bombazo de Stephenson, con aires cyberpunk más moderados, ha sido sin duda alguna Criptonomicón, que combina este subgénero con la narración histórica, la divulgación de la criptología y una buena dosis de humor variopinto.

   En fin, que quien crea que el cyberpunk no tiene nada nuevo que decir tras Matrix se va a llevar una sorpresa, pues el género evoluciona al mismo ritmo que la tecnología...

 

CORRIENTES EN EL TIEMPO Y EL ESPACIO

   Finalmente, para terminar, quisiera citar brevemente algunos nuevos movimientos aparecidos en la cf y que, tal vez, se acaben convirtiendo en subgéneros propios en poco tiempo. También me gustaría hacer una pequeña reseña de posibles corrientes que, sin tener entidad suficiente como para ser consideradas hoy por hoy como subgéneros propios, merecen unas palabras, ya que resulta complicado catalogarlas fácilmente en los anteriores apartados.

CIENCIA FICCIÓN HUMORÍSTICA

   No es especialmente abundante aunque tampoco es una corriente aislada y falta de contribuciones interesantes. En ella el autor pretende hacernos reflexionar desde la causticidad o bien hacernos reír, sin más. Se explica, pues, que cueste catalogar una obra con componente humorística dentro de un subgénero propio, pues a veces el humor es un elemento más.

   Existen varios autores de cf que se han especializado en el humor. Tal el es caso de Douglas Adams y su extrordinaria Guía del autoestopista galáctico, parodia donde las haya de las space opera. Fue continuada con obras de desigual calidad humorística: El restaurante del fin del mundo, La vida, el universo y todo lo demás y Hasta luego, y gracias por el pescado con mayor componente cf y menos de humor.

 

 

   La parodia de alguna obra conocida dentro del género es difícil, por las razones que nos expone en su libro David Langford y su delicioso Guía del dragonstopista galáctico hasta el campo de batalla estelar de Covenant en el límite de Dune: Odisea dos, con título inacabable y con algunas verdaderas joyas como la parodia de Conan, la de Asimov y sus viudos negros o la delirante sátira de Dune y la prosa Herbertiana. También son paródicas Tik-tok de John Sladek, con un robot asimoviano un tanto psicópata, o la divertida serie Bill, héroe galáctico de Harry Harrison, sátira inigualable de la muy militarista Tropas del espacio (Robert Heinlein) y space opera a su vez.

   Algunos autores tienen un estilo ácido y sarcástico que, según como, también podría permitir incluir algunas de sus obras en la cf humorística. Tal es el caso de Kurt Vonnegut en novelas como Galápagos o Las sirenas de Titán.

   La crítica sarcástica también la encontramos en autores como Frederik Pohl y Cyril Kornbluth y algunas de sus creaciones son inolvidables: en Mercaderes del espacio (Pohl y Kornbluth) y La guerra de los mercaderes (Pohl) se ríen del capitalismo y de la publicidad hasta extremos delirantes; El síndico, de Kornbluth, nos retrata unos Estados Unidos regidos por la mafia en los que las cosas funcionan la mar de bien; o La llegada de los gatos cuánticos, de Pohl, con unas cuantas corrosivas ucronías de universos en los que las cosas han sido ligeramente diferentes.

   Tal vez, las creaciones humorísticas más divertidas las hallamos en el relato corto y algunos de los más divertidos los ha recopilado Joe Haldeman en la antología Humor cósmico. Autores clásicos, como Isaac Asimov y Fredric Brown, cultivaron también el humor en esta extensión. Del primero destacaremos la serie de relatos ligeramente fantásticos recogidos en Azazel sobre un pequeño demonio que concede deseos a los humanos, haciéndolos con ello terriblemente desgraciados. Del segundo la divertidísima novela Marcianos Go Home! que nos muestra unos "marcianos" groseros, entrometidos, maleducados y con muy mala leche que harán las delicias de los amantes de lo "políticamente incorrecto". No podemos olvidar tampoco a Stanislaw Lem y sus ácidas historias de Ijon Tichy (Diarios de las estrellas, Congreso de futurología) o sus robots nada asimovianos (Ciberiada).

   Y en nuestra casa dos piezas magistrales de una calidad excepcional: el absolutamente desternillante Sin noticias de Gurb de Eduardo Mendoza (único libro con el que no he parado de llorar de la risa) y Estado crepuscular, de Javier Negrete, con un caradura simpático como protagonista y con unos extraterrestres de alivio.

PRIMER CONTACTO

   He procurado rehuir una clasificación temática del tipo "novelas de robots", "novelas de catástrofes" o "novelas de marcianos". Pero me cuesta resistirme ante aquellas obras que narran el primer contacto de la Humanidad con una inteligencia extraterrestre. El motivo es que esta temática es extraordinariamente atractiva y su tratamiento obliga al autor a plantearse multitud de cosas tales como ¿quiénes somos? ¿nos conocemos a nosotros mismos? ¿estamos solos?, de gran trascendencia filosófica y que ha dado grandes novelas y relatos magistrales.

   Algunas de estas pueden catalogarse de hard (2.001: una odisea en el espacio, de Arthur C. Clarke), aunque rara vez sólo eso. 2.001 tiene componentes filosóficas y utópicas muy profundas. De alguna manera Clarke ha hecho de él su tema estrella (El fin de la infancia, Encuentro con Medusa o El centinela).

   Más especulativa es la serie del centro galáctico de Benford y, en concreto, En el océano de la noche, acerca del encuentro del hombre con una inteligencia máquina. Otras más clásicas apuntan en la línea de los aliens invasores, como la por todos conocida Guerra de los mundos de H. G. Wells o Amos de títeres de Robert Heinlein.

 

   Un caso muy común viene cuando el contacto era un mensaje, como El texto de Hércules (Jack McDevitt) o La voz de su amo (Stanislaw Lem); otras tenían mensaje y viaje: Contacto (Carl Sagan); en otras son los aliens los que nos vienen a la Tierra y desencadenan todo tipo de especulaciones: La llegada (Joe Haldeman) ó El día que llegaron los marcianos (Frederik Pohl).

   Algunos primeros contactos se caracterizan por el choque cultural (Empotrados, Ian Watson; Un caso de conciencia, James Blish; Fiasco, Stanislaw Lem), la total incomprensión (Solaris, también de Lem) o la indiferencia (Pícnic junto al camino, de Arkadi y Boris Strugatsky). Aunque claro, no siempre un primer contacto lo llevan a cabo diplomáticos o científicos (Restos de población, de Elisabeth Moon).

STEAMPUNK

   Variante de las ucronías que desarrolla sus historias en un siglo XIX alternativo completamente dominado por la tecnología de la máquina de vapor. A veces ésta es sustituida por elementos de corte fantástico. El nombre proviene, medio en broma, de cyberpunk, pero cambiando el cyber por steam (vapor).

   Quizás la novela más representativa de esta corriente sea The difference engine, escrita al alimón por William Gibson y Bruce Sterling, que a través de un cúmulo de escenas inconexas extrapola cómo sería el mundo a mediados del siglo XIX si Charles Babbage hubiese conseguido hacer funcionar su máquina analítica.

   En este subgénero se engloban las primeras novelas de James P. Blaylock como Homúnculo y también tiende a considerarse como tal Las puertas de Anubis de Tim Powers, a mi entender de manera no del todo correcta. Éste jamás utilizó en sus libros la clave principal para entender una novela como steampunk: la máquina de vapor. Por el contrario, en sus argumentos el motor de los acontecimientos es casi siempre sobrenatural, por lo que son completamente fantásticos.

   Otro autor que se apuntó al carro del steampunk fue Stephen Baxter con la verniana Antihielo, donde una curiosa sustancia ha provocado un mundo con una historia y tecnologías completamente diferente al nuestro. También podría encuadrarse en esta corriente, al menos en parte, Las naves del tiempo, del mismo autor, una pseudo continuación de La máquina del tiempo de Wells, estimulante y meritoria.

 

   También podría incluirse en este apartado La estación de la calle Perdido ya que la tecnología que gobierna la ciudad de Nueva Crobuzón, una suerte de Londres victoriano ultra tecnificado, funciona al ritmo de los pistones impulsados por el vapor. Además, para deleite de los fanáticos del steampunk, aparecen IAs que utilizan como base la máquina diferencial de Babbage.

   Esta corriente es una de las más recientes, por lo que posiblemente la veremos evolucionar bastante. Tal vez la máquina de vapor y el siglo XIX dejarán de ser elementos imprescindibles, y serán sutituidos por otras épocas (los griegos ya inventaron una máquina de vapor, aunque nunca le diesen una aplicación práctica) u otros entornos tecnológicos primitivos.

   Para más información sobre este subgénero, consultar el excelente artículo de Julián Díez: El steam-punk y Tim Powers.

TECNO THRILLER

   Un caso especial de cf hard (o a veces soft) es el tecno thriller, esto es, una novela de intriga y aventuras, a veces cercana a la novela negra, en la que los elementos tecnológicos son omnipresentes y forman parte central de la trama.

 

   Algunos autores cultivan casi exclusivamente este género, como Michael Crichton en Parque Jurásico, La amenaza de Andrómeda o Presa. También lo encontramos en el último Arthur C. Clarke, en libros como El espectro del Titanic o El martillo de Dios.

   Estas obras, sobre todo las de Crichton, están más cerca del mainstream que no de la cf, aunque suelen publicarse como cf muchas veces o están aceptadas por los aficionados como tales. Y aunque no es fácil de catalogar, pues tiene elementos de varios subgéneros, Criptonomicón de Neal Stephenson cumple algunos de los requisitos para incluirlo en esta categoría.

 

CIENCIA FICCIÓN POÉTICA

   Ciencia ficción que, por su tratamiento argumental y estilístico, es de gran lirismo o de especial belleza formal.

   Pienso, sobre todo, en buena parte de la obra de Ray Bradbury y muy especialmente en Crónicas marcianas.

EL PAISAJISMO

 

   En parte ligado a la ciencia ficción poética, serían aquellas obras en que el lenguaje formal es especialmente rico en descripciones sobre paisajes y en las que éste es un protagonista más, llegando a ser incluso el tema principal.

   También aquí pienso en un autor: James G. Ballard y muy especialmente en obras como El mundo de cristal, El mundo sumergido o La sequía, donde el estado mental del protagonista está en consonancia con el alterado mundo que se encuentra a su alrededor. Muchas de las descripciones que "pinta" son dignas de un cuadro de Dalí, especialmente en el primer título, un libro de una riqueza imaginaria notable.

 

   Y para acabar, una corriente que parece seguir la conocida ley de Clarke: "Toda tecnología suficientemente avanzada se verá como magia por una cultura mucho más primitiva" o

ESTO NO ES LO QUE PARECE

   Obras de cf aparentemente de fantasía pero que, a partir de un cierto momento, se transforman en ciencia ficción al esclarecerse e interpretarse racionalmente los elementos que inicialmente nos parecieron mágicos. También se pueden englobar aquí aquellas novelas de ciencia ficción con estética y tratamientos más propios de la fantasía.

   Algunos ejemplos de esta corriente son Sagrada de Elia Barceló, El árbol familiar de Sheri S. Tepper, Serpiente del sueño de Vonda McIntyre o La reina del aire y la oscuridad, de Poul Anderson.

 

   A veces no existe componente fantástico; simplemente, al revelarse un hecho capital, el punto de vista que inicialmente tiene el lector se transforma y nada vuelve a ser igual. Como ejemplos de este tipo podemos citar La nave estelar de Brian Aldiss, Nave de sombras de Leiber o En la guarida del gusano de George R. R. Martin. En otras ocasiones, la ley de Clarke está más presente que nunca: en el Libro del Sol Nuevo, de Gene Wolfe, se nos describe una sociedad que ha perdido la noción de su pasado y para la que las tecnologías parecen magia.

   Incluso, la tecnología puede utilizarse deliberadamente para recrear seres de aspecto fantástico con las intenciones más diversas. En El beso de Milena, de Paul McAuley, la nano y la biotecnología terminan creando, a mediados del siglo XXI, todo tipo de seres que atienden a los eufónicos nombres de hadas y otras criaturas mitológicas. Y en Malignos, de Richard Calder, unas criaturas con ese nombre, de apariencia demoniaca y que viven en el subsuelo de la Tierra en futuro lejano, son la evolución de seres humanos modificados genéticamente.

   

CONCLUSIÓN

   Tras tratar de catalogar un montón de obras de ciencia ficción, llego a la conclusión de que nuestro género es extraordinariamente amplio y flexible y que, ciertamente, ofrecer una buena definición sobre lo que en realidad es ciencia ficción, no deja de ser algo más bien propio de la fantasía... o del terror.

 

@2003 Enric Quílez para cYbErDaRk.NeT
Prohibida la reproducción sin permiso expreso del autor

    

2004-02-09 22:16   Nasi2
Excelente artículo, realmente muy interesante. Apenas he leído cf (Scott Card, Asimov, Bradbury, Orwell), y es gracias a este artículo que he descubierto todo el mundo que hay detrás de esas siglas. He leído los tres de un tirón, y no hay nada reprochable en ninguno de ellos. ¡Felicidades!
2004-01-11 18:57   vorkosigan
Un articulo (aunque este dividido en 3 partes) maravillosos, me ha parecido bien documentado, ameno y muy clarificador. Ademas tiene una gran virtud y es que no da nada por sabido (lo que he agredecido mucho).
Ademas da para futuras lecturas.¡¡ Enhorabuena y gracias!!
2004-01-09 13:24   Palantir
Ya me vale. Ese día estaba espeso. Paciencia
2004-01-05 13:49   Palantir
(2º intento). Me encanta el artículo, pero solo he podido leer la tercera parte. ¿serie posible acceder a las dos primeras?. Estoy haciendo cosillas relacionadas con el tema.
Gracias y saludos
2003-12-16 12:42   shardin
Un buen artículo que sirve para orientar a mucha gente que se inicia en esto, y no conoce muchos libros de sus temas/autores favoritos.
2003-12-08 01:21   Shirkou
Un articulo excelente, es la primera vez que veo una explicacion clara de las partes en las que se divide la ciencia ficcion. Magnifico
2003-11-30 17:34   the_ring
excelente informe pero con una falla ...en la seccion esto no es lo que parece...porque no esta El señor de la luz???
creo que es uno de los mejores ejemplos de fantasia que en el fondo es ciencia ficion.
lo demas,he aprendido mucho,gracias!!!
2003-11-25 22:59   JORJOR
Buen colofón a la serie.Seguramente muchos de los que hemos leído los artículos tenderemos,de ahora en adelante,a la clasificación de las obras que leamos,y así a una crítica mas objetiva.Y si compartimos opiniones,facilitaremos al que no las haya leído una mayor información en bien de todos.
Gracias y saludos.
2003-11-17 18:41   Leto.
Felicito al autor de tan interesantes articulos , he aprendido mucho sobre los géneros y sub-géneros de la C.F. no sabia que existiesen tantos, sin quererlo me he enterado que lo dos generos que mas leo son el científico con Asimiov, ClarK, etc y el Space Opera con Iain Brans.
2003-11-14 21:27   Gonzo
Yo también quiero felicitar a Enric por estos artículos, realmente interesantes y como muy bien dice "jagr", le hace ver a uno lo ignorante que es y lo que nos queda por disfrutar.... un saludo. G.
2003-11-12 00:21   jagr
Muy bien explicado. Sin duda me servirá para poder clasificar mentalmente muchos de los libros que he leido y no sabia como clasificarlos. Y ahora que he leido estos articulos, me doy cuenta de lo ignorante que soy y de todos los mundos que hay por descubrir jejejejjejeje.
2003-11-10 21:53   Lobo7922
Robert Sterling escribio uno muy raro, "el Chico Artificial", en lugar de desarrollar un argumento con una poderosa red de computadoras, en este caso se trata de una enorme red de televisiòn, con camaras volando a todos lados filmando a todo el mundo, muy curiosos un preliminar al ciberpunk
2003-11-04 15:43   Lobo7922
La verdad es que yo tambièn te felicito por el esfuerzo que had hecho y por tu amplia variedad de conocimientos, sin embargo me gustarìa comentarte que yo considero que "Las Puertas de Anubis" y la otra literatura de Tim Powers si podrìan ser consideradas "Steam Punk" esto lo digo por que a mi juicio Powers mantiene una coherencia a travès de toda su historia, lo que el describe no es simple màgia, por el contrario parece ser màs bien una ciencia no descubierta por completo, pero que aùn asì obedecerìa al mètodo cientìfico, bueno es mi opiniòn
2003-11-03 18:12   Chip
Un gran trabajo, muy completo y ameno, así da gusto informarse!
2003-11-03 17:32   NOLLE
Gracias por esta serie de artículos, desde luego han sido muy interesantes, muy útlies como referencia y guia.
Me han encantado, felicidades!!! :D
2003-11-03 15:36   Moncho21
Muchas felicidades por la serie de artículos.

Aparte de ilustrativos a nivel personal, creo que los recomendaré a todas las personas que me miran cual bicho raro como consumidor de "marcianadas", sin entender que a lo mejor estos libros pueden aportar algo más que rayos láser.
2003-11-03 11:50   OrionKnight
No hace mucho un amigo con ganas de empezar a leer CF, me preguntaba que "tipos" de ciencia ficción había y me puse a enumerar unos cuantos subgéneros obvios y obras asociadas a ellos. Pero al cabo de un rato me di cuenta que habia varios de ellos dudosos. No soy muy partidario de encasillar novelas en un género concreto porque creo que las limita pero si que es cierto que ha un criterio clasificatorio obvio.

Al cabo de un par de semanas se publicó el primero de esta serie de artículos. Rapidamente me puse en contacto con mi amigo y le dije que le echase un vistazo. Me agradeció mucho la indicación y queria trasladarsela al autor.

Mi amigo la utiliza como referencia para introducirse en algunos temas que son mas de su interés.
2003-11-03 11:20   db105
Me uno al coro de alabanzas :grin: Muy buena toda la serie de artículos.
2003-11-02 22:44   instanton
Un buen artículo como los otros dos. Su mejor logro es la introducción de ciertas obras que no se pueden clasificar dentro de los grandes subgéneros, desde luego todo un acierto. Sobre todo la consideración del tema del primer contacto, bastante más infrecuente en la cf de lo que debería ser.
Un gran trabajo.
2003-11-02 19:48   Gimli
Simplemente felicitarte, los tres artículos han sido magníficos.

Saludos.